Ulises

Lanzado en October de 1990, Ulises explorará las regiones polares del Sol. Tiene una órbita que oscila lejos del plano de la eclíptica, dándole un punto privilegiado desde el cual estudiar el Sol. Mide las emisiones de radiofrecuencia producidas por electrones de alta energía expulsadas por el Sol. Estos electrones siguen las líneas del campo magnético del Sol, y su interacción con el plasma del viento solar genera emisiones de radio llamadas estallidos de radio de Tipo III.

Ulises utilizó una maniobra de asistencia gravitacional con Júpiter, para girar su plano orbital lejos de la eclíptica, convirtiéndose en la primera nave espacial en ir a altas latitudes eclíptica (máx. 80¡) y sobre los polos del Sol. Para controlar las emisiones de radio, tiene una larga antena dipolar de 72,5 metros, y un receptor sensible con 76 canales de frecuencia discretas entre 1 y 940 kHz. Los estallidos de radio más lejos del Sol, tienen menores frecuencias características, por lo que el detector de multibanda puede mapear los estallidos a diferentes distancias para representar el campo magnético del Sol.

Los electrones procedentes del Sol viajan a velocidades en el rango de 0,1 a 0.3c, de modo que barren al radio de la órbita de la Tierra en unos 30 minutos. Esto permite el mapeo de una línea de campo magnético en un corto período de tiempo para obtener un dibujo casi instantáneo del campo magnético del Sol. Se ha encontrado que las líneas de campo tienen forma espiral, como se había predicho como resultado del viento solar hacia el exterior y la rotación del Sol. La forma se llama una espiral de Arquímedes.

Campo Magnético del Sol desde Ulises

Los electrones procedentes del sol viajan a velocidades en el rango de 0,1 a 0.3c, de modo que barren al radio de la órbita de la Tierra en unos 30 minutos. Esto permite el mapeo de una línea de campo magnético en un corto período de tiempo para obtener un dibujo casi instantáneo del campo magnético del Sol. Se ha encontrado que las líneas de campo tienen forma espiral, como se había predicho como resultado del viento solar hacia el exterior y la rotación del Sol. La forma se llama una espiral de Arquímedes.